PLAZA DE SAN JAIME - PROCLAMACION ESTADO CATALAN 1934


En la fotografía Tropas del General Batet en la Plaza San Jaime de Barcelona, una vez sofocada la rebelión de Companys

Tras la proclamación por Companys del Estat Catalá, el general de la IV División, Domingo Batet, que actuaba de acuerdo con Lerroux, desplegó unidades del Ejército por la ciudad de Barcelona.

Los soldados fueron tiroteados por los escamots y otros afiliados a las organizaciones nacionalistas, que se habían hecho fuertes en varios edificios oficiales y sedes políticas y sindicales.

Contra las previsiones de Dencás, en poco influyó que la Generalidad tuviese las competencias de orden público, pues la Guardia Civil y la de Asalto se decantaron por la legalidad constitucional.

Sólo los Mozos de Escuadra que guarnecían el Palacio de la Generalidad dispararon contra los soldados.

Después de 10 horas de lucha, Companys se rindió y fue detenido junto con sus consejeros.

Con un tacto reconocido por los vencidos, Batet logró sofocar la sublevación minimizando la violencia.

Con todo, el saldo fue de medio centenar de muertos y más del doble de heridos graves, entre ambas partes.

Companys fue sustituido al frente de la Generalidad por el coronel Jiménez Arenas, nombrado por Batet y que se mantuvo en el cargo las semanas que duró la ley marcial.

Tras el levantamiento quedaba desmantelar la infraestructura de los sublevados -sobre todo decomisar el armamento- y detener a los huidos, como Dencás y sus subalternos.

Se suscitó, en este periodo, un intenso debate político en que se planteó la derogación del régimen autonómico, utilizado con evidente deslealtad por ERC y sus aliados.